miércoles, 27 de octubre de 2010
If I could only find a voice I would speak...
I've been trying for hours just to think of what exactly to say
I thought I'd leave you with a letter of fiery speech
Like when an actor makes an exit at the end of the play
And I've been dying for hours
Trying to fill up all the holes with some sense
I'd like to know how you faded and you threw it away
I'd like to give you all the reasons and what everything meant
Well I could tell you good-bye
Or maybe see you around
With just a touch of sarcastic thanks
We started out with a bang
And at the top of the world
Now the guns are exhausted
And the bullets are blanks
And everything's blank
If I could only find the words then I would write them all down
If I could only find a voice I would speak
But it's there in my eyes so can't you see me tonight
C'Mon and look at me and read 'em and weep
If I could only find the words then I would write them all down
If I could only find a voice I would speak
Oh it's there in my eyes so can't you see me tonight
C'Mon and look at me and read 'em and weep
I've been whispering softly
Trying to build a cry up to scream
We let the past slip away
And put the future on hold
Now the present is nothing but a hollowed out dream
I've been dying for hours
Trying to fill up the holes eith some sense
I'd like to know why you faded and you threw it away
I'd like to give you all the reasons
And what everything meant
Well I could tell you good-bye
Or maybe see you around
With just a touch of sarcastic thanks
But now the rooms are all empty
And the candles are dark
The guns are exhausted
The bullets are blanks
And everything's blank
If I could only find the words then I would write them all down
If I could only find a voice I would speak
oh it's there in my eyes oh can't you see me tonight
C'Mon and look at me and read 'em and weep
It's there in my eyes and coming straight from my heart
It's running silent and angry and deep
It's there in my eyes and it's all I can say
C'Mon and read 'em and weep
Read 'em and weep
For all the hours we'll be spending alone
Read 'em and weep
For the dreams we'll ignore
Running silent and deep
And all those promises we promised to keep
They won't be kept anymore
Read 'em and weep
For the magic that our bodies had made
Read 'em and weep
For the blood that we've lost
Running silent and deep
And all those secrets that we somehow betrayed
For whatever the cost
Read 'em and weep
For the memories still alive in the bed
Read 'em and weep
For the lies we believed
Running silent and deep
And all the things that can never be said
Why don't you look at me and read 'em and weep
C'Mon and look at me and read 'em and weep
It's there in my eyes and coming straight from my heart
It's running silent and angry and deep
it's there in my eyes it's all i can say
C'Mon and look at me and read 'em and weep
domingo, 17 de octubre de 2010
En días como este quisiera tener una amiga
Las que tenía quedaron perdidas en mis días de universidad, quedaron perdidas el día de la boda entre los amadrinamientos, el lazo, el ramo, las arras...
Porque mi ex-esposo, sí mi ahora ex-esposo (al que podríamos llamar Roberto), se encargó de ahuyentarlas a todas los primeros meses de matrimonio. Que unas mucho hablaban, que las otras muy putas, que las otras muy superficiales, que las otras solo en la calle me querían tener... Al año de casada no tenía ni una amiga, alguien que me fuera a ver a la casa el día que nació el niño, alguien que me sacara de la casa cuando ya no aguantaba el desvelo y los tres meses de encierro tratando de ser la madre perfecta, una amiga a quien contarle toda la historia con el jefe en una fiesta de navidad, una amiga a quien decirle que lo que sentí esa noche no lo sentí jamás ni siquiera en las mejores noches de sexo con Roberto... Una amiga para todas esas cosas irrelevantes.
Ahora, mientras escribo esto sería chivo en vez de la compu tener a una amiga sentada allí enfrente para contarle todo esto con un cafecito y quesadilla. Aunque a la amiga no le contara esto, le contaría del silencio en las noches, de las lágrimas en la mañana, de la falta que me hace, de la manera en que lo odio, del color de sus palabras, del olor de su ausencia.
Una amiga tal vez me dijera que acepte salir con el compañero de la par al menos algún viernes, aunque el compañero sea 5 años menor que yo. O que me aleje del jefe, de su oficina, de los 10 años que tengo de conocerlo, del beso que nos dimos esa Navidad hace años... Una amiga me dijera que salga, que ya basta de esto, que cuatro meses son suficiente.
Pero no hay amiga. Ni café. Ni quesadilla.
Porque mi ex-esposo, sí mi ahora ex-esposo (al que podríamos llamar Roberto), se encargó de ahuyentarlas a todas los primeros meses de matrimonio. Que unas mucho hablaban, que las otras muy putas, que las otras muy superficiales, que las otras solo en la calle me querían tener... Al año de casada no tenía ni una amiga, alguien que me fuera a ver a la casa el día que nació el niño, alguien que me sacara de la casa cuando ya no aguantaba el desvelo y los tres meses de encierro tratando de ser la madre perfecta, una amiga a quien contarle toda la historia con el jefe en una fiesta de navidad, una amiga a quien decirle que lo que sentí esa noche no lo sentí jamás ni siquiera en las mejores noches de sexo con Roberto... Una amiga para todas esas cosas irrelevantes.
Ahora, mientras escribo esto sería chivo en vez de la compu tener a una amiga sentada allí enfrente para contarle todo esto con un cafecito y quesadilla. Aunque a la amiga no le contara esto, le contaría del silencio en las noches, de las lágrimas en la mañana, de la falta que me hace, de la manera en que lo odio, del color de sus palabras, del olor de su ausencia.
Una amiga tal vez me dijera que acepte salir con el compañero de la par al menos algún viernes, aunque el compañero sea 5 años menor que yo. O que me aleje del jefe, de su oficina, de los 10 años que tengo de conocerlo, del beso que nos dimos esa Navidad hace años... Una amiga me dijera que salga, que ya basta de esto, que cuatro meses son suficiente.
Pero no hay amiga. Ni café. Ni quesadilla.
sábado, 16 de octubre de 2010
Ellos dicen.
Cuatro meses después, mientras firma los papeles del divorcio, me dice que perdió catorce años de su vida...
La sicóloga, terapeuta, consejera o como diablos se llama me dice que siga escribiendo este blog, que no importa si alguien me lee o no... Que escriba, escriba, escriba.
Mi hijo de trece años maldice todos los días al papá. Dice que lo quisiera ver muerto.
Mi jefe, con quien nos besamos en una fiesta hace años, me mira todos los días con ojos diferentes y me dice que demasiado me tardé en separarme de ese hijodeputa -como si no supiera que fue él quien me dejó a mí-.
Mi compañero del escritorio de al lado me trata como si estuviera enferma, me dice todos los días que me dé tiempo para sobrepasarlo... Y me invita casi todos los viernes a salir.
Yo no digo nada. Solo quiero dormir o mirar el techo.
La sicóloga, terapeuta, consejera o como diablos se llama me dice que siga escribiendo este blog, que no importa si alguien me lee o no... Que escriba, escriba, escriba.
Mi hijo de trece años maldice todos los días al papá. Dice que lo quisiera ver muerto.
Mi jefe, con quien nos besamos en una fiesta hace años, me mira todos los días con ojos diferentes y me dice que demasiado me tardé en separarme de ese hijodeputa -como si no supiera que fue él quien me dejó a mí-.
Mi compañero del escritorio de al lado me trata como si estuviera enferma, me dice todos los días que me dé tiempo para sobrepasarlo... Y me invita casi todos los viernes a salir.
Yo no digo nada. Solo quiero dormir o mirar el techo.
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